Uso de medicina alternativa en aves de producción.

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Medicina Alternativa

Autor para correspondencia MVZ. Armando Galán Madrigal

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La avicultura es una de las actividades pecuarias con mayor crecimiento en los últimos años. El crecimiento de la población ha aumentado la demanda de alimentos, y para satisfacer estas necesidades, los productores de huevo y pollo han desarrollado sistemas que permitan cumplir con las exigencias de los mercados actuales. Dentro de estos, el manejo de la salud siempre ha sido una pieza fundamental para su correcto funcionamiento, siendo los antibióticos el arma más importante con la que se cuenta para enfrentar las enfermedades bacterianas que se presentan en la producción intensiva.

El uso de antibióticos aumentó conforme crecían los sistemas de producción, siendo utilizados para el tratamiento de muchas enfermedades comunes, llegando a administrarse con dosis sub terapéuticas para la prevención de enfermedades y como promotores del crecimiento adicionados en el alimento. El uso descontrolado de antibióticos genera problemas de resistencia bacteriana y en caso de no respetar los tiempos de retiro, esta resistencia también podría generarse en los humanos.

El riesgo que representan los residuos de antibióticos en los productos de origen animal ha comenzado a generar incertidumbre en los consumidores y un sector de la población ahora busca productos alternos en los cuales el uso de antibióticos sea menor o nulo.

Los sistemas de producción orgánicos y ABF han buscado alternativas para prevenir y tratar las enfermedades que se presentan, e incluso se han encontrado algunas alternativas que funcionan como promotores del crecimiento en pollos de engorde.

La composición química de los extractos de plantas es muy variada, contienen terpenos, fenoles, ácidos orgánicos, alcoholes, aldehídos, cetonas, entre muchas otras sustancias con propiedades terapéuticas. En la producción de aves se han utilizado extractos de Manzanilla, orégano, ajo, cilantro, eucalipto, cebolla, canela y epazote, demostrando tener propiedades antimicrobianas para el tratamiento de infecciones y, además, se han utilizado como una alternativa a los promotores de crecimiento. Existen otros extractos de plantas a los cuales se les atribuyen propiedades relajantes, y que son administradas en el agua de bebida en situaciones de estrés, tales como manejo de los animales, cambios de jaula, traslados y otras situaciones que representen periodos estresantes para las aves. Ejemplo de estas plantas son la valeriana, pasiflora, flores de Bach, entre otras. Estas pueden ayudar a reducir la inmunosupresión que genera el estrés en las aves.

Un estudio mencionado por Mayo (2018) utilizó la combinación de harinas de hojas de orégano y albahaca adicionadas al 0.07% en la dieta de pollos de engorda, está tuvo un efecto similar a la flavomicina al 4%, utilizada como promotor del crecimiento en la industria avícola. Las combinaciones de harinas de plantas aromáticas tienen efecto sobre la conversión de alimento e incrementan la viabilidad de la parvada.

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Otra opción que se ha estudiado en años recientes son los ácidos orgánicos y sus sales, estos son productos naturales del metabolismo microbiano o de la fermentación de los carbohidratos que adicionados en el alimento ayudan a mejorar el rendimiento productivo y la salud intestinal a través de diversos mecanismos como promover el desarrollo de la pared intestinal y el crecimiento de bacterias benéficas, reduciendo la colonización por bacterias patógenas en el tracto digestivo de pollos, gallinas y pavos.

Ángel, Mesa y Solarte (2019) Mencionan un estudio en el cual se observó mejor conversión alimenticia en aves suplementadas con 3% de ácidos orgánicos (láctico, butírico y fumárico) que aquellas que no recibieron ningún ácido en la dieta, por lo que se concluyó que es posible sustituir el uso de antibióticos promotores del crecimiento por ácidos orgánicos en el pollo de engorda.

En general, el uso de probióticos, prebióticos, aceites esenciales, enzimas, ácidos orgánicos y todas las alternativas para evitar el uso de antibióticos deben ir enfocadas a la prevención de infecciones bacterianas. En ese sentido, si el objetivo es reducir la administración de antibióticos, el calendario de vacunación que se aplique en la granja deberá proteger contra todas las posibles enfermedades bacterianas a las que estarán expuestas las aves, para evitar que estas se infecten y desarrollen enfermedades que serán muy complicadas de controlar sin antibióticos, por ejemplo, Salmonella, E. coli, Avibacterium paragallinarum causante de coriza infecciosa y Pasteurella multocida, que produce cólera aviar, entre otras de gran importancia dentro de la avicultura. Además, la vacunación contra enfermedades de origen viral también toma mayor relevancia, ya que pueden servir como infecciones primarias que posteriormente se complicarán con infecciones bacterianas secundarias que puedan generar problemas muy difíciles de controlar sin medicamentos alópatas. Tal es el caso de las vacunas más comunes, como enfermedad de Marek, Bursitis infecciosa, Enfermedad de Newcastle, viruela aviar, entre muchas otras, que podrían inmunosuprimir a los pollos de engorda o las gallinas de postura, permitiendo las infecciones secundarias con distintos patógenos de origen bacteriano.

Se han encontrado alternativas naturales para prevenir enfermedades en las aves, pero aún falta más información e investigación sobre su eficacia en el tratamiento de infecciones, así como profundizar en sus propiedades terapéuticas, por el momento, los antibióticos representan la forma más eficaz de combatir infecciones bacterianas, y cuando es necesario su uso, debe hacerse de manera responsable, evitando la sub dosificación y completando los tratamientos para reducir el desarrollo de cepas resistentes.

La demanda de productos libres de antibióticos sigue creciendo y la legislación en diferentes partes del mundo ha comenzado a poner restricciones sobre su administración en animales de producción. Actualmente, la opción más segura para prevenir infecciones sigue siendo la vacunación y con la utilización de aditivos funcionales se busca promover la salud mediante la aplicación de alternativas naturales que eviten desequilibrios nutricionales y el desarrollo de infecciones en nuestras aves, de esta manera, podemos controlar el uso de fármacos que pudieran pasar de forma residual de los alimentos a los seres humanos.

Bibliografía

Ascención V.J. 2011. Efecto de la adición de una combinación de medicina natural (orégano, cebolla, ajo, cilantro, epazote y manzanilla) vs promotores del crecimiento sobre los parámetros productivos de pollos de engorda. Licenciatura. Universidad veracruzana. México.

Pender C; Schieder C; et al. 2015. Hacia una producción libre de antibióticos. Science and solutions. No. 27. Austria.

Baier A. 2015. Producción de aves orgánicas para carne y huevo. NCAT. Estados Unidos de América.

Ángel J; Mesa N; Narvaez W; 2019. Ácidos orgánicos, una alternativa en la nutrición avícola: una revisión. Rev. Ces. Med. Zootec. Vol 14. (2). P. 45-58.

Mayo R; 2018. Aves de traspatio y extractos vegetales contra patógenos avícolas, una contribución a la seguridad alimentaria. Maestría. Universidad Autónoma de Guerrero. México.

Montoya. V. 2018. Ácidos orgánicos como alternativa a los antibióticos en dietas para pollos sobre respuesta productiva, salud intestinal y bienestar animal. Consultado en línea e 5 de mayo del 2021 en: https://www.avicultura.mx/dest...